Rosa Codina nació el mismo año de 1987 en que se desarrolla la historia de Rompepistas. Lo hizo en Ordal, un pueblo del Alto Penedés, en la provincia de Barcelona, rodeado de viñas y montañas. Aunque allí la gente se pasa la vida en la viña, Rosa decidió desmarcarse y orientó sus pasos hacia el cómic y la ilustración, desoyendo con muy buen criterio todas las voces que le desaconsejaban el dibujo como forma de vida.