Después de admitir la infelicidad, ¿cuál es el siguiente paso? 17/11/2020 – Publicado en: Adelanto, Novedades – Tags: , , , , , , , , , ,

Mia está a punto de cumplir treinta. Lleva una década viviendo en Bolonia, desde que comenzó la carrera de Bellas Artes, y comparte piso con su pareja y otras cinco personas que piensan que lavar los platos o comprar papel higiénico es opcional.

Hace siglos que sale con Manu, que trabaja en una pizzería y escribe su primera novela por las noches. A los veinte, cuando se conocieron, todo era maravilloso, un movimiento constante y continuo, aquel ferviente latir que nos recuerda que estamos vivos. Pero, últimamente, lo más excitante que han hecho ha sido ver Juego de tronos.

Manu cree que ha llegado la hora de asentarse y de tener familia, porque es lo que toca, ¿no? Vivir solos, como una pareja real, como adultos. En cambio, Mia no lo tiene del todo claro, acaba de dar puerta al último de tantos trabajos mal pagados que ha tenido, en los que la “libertad” y la “flexibilidad laboral” enmascaraban una jornada completa por 700 € al mes, y ¡encima tenía que dar las gracias!

Mia ya ni recuerda cuándo abandonó su sueño de ser escultora y dejó de aspirar a algo más que a un simple ganarse la vida. Entró de lleno en el cuento de la realización personal a través del trabajo, el de la felicidad plena, el del gran amor que te hace suspirar eternamente… Pero, he aquí la trampa, pensar que había tierra firme allá donde la precariedad se ha vuelto norma. Manu representa su único amarre, el puerto estable que garantiza cobijo y una cena caliente, pero ahora su vida parece haberse vuelto en contra.

¿Qué ha pasado? Wendy y Peter pan se han convertido en dos adultos, incapaces de encontrar consuelo en el afecto recíproco, han alcanzado el punto muerto al que llegan todas las relaciones, donde se acaban los finales de las películas y comienza el agujero de guion.

¿Qué viene después del “y vivieron felices y comieron perdices”? ¿Quiénes fueron los artífices de esta maquinaria de ilusión? Como Truman Burbank, Mia está a punto de salir del plató de su propia vida, de abrir una puerta hacia lo desconocido. Y en este punto tan exacto como incierto, Mia debe escribir el capítulo de su vida que requiere mayor esfuerzo inspiracional, sin guion, sin ideales, tratando de encontrar el equilibrio justo entre la realidad y la fantasía.

Flavia Biondi ha sabido crear un cómic que pone en tela de juicio todas las ilusiones de la modernidad, los modelos preestablecidos, la existencia de una vida plena, y que, desde nuestra vulnerabilidad como seres humanos, trata de redescubrir una nueva vida en común, una nueva manera de estar juntos.

Tiempos precarios es un campo abierto en tonos azules hacia la pregunta por qué tipo de vida queremos vivir, por la clase de persona queremos ser. ¡Descúbrelo en este adelanto que te hemos preparado!